El Doctor que está viendo a Juan en la Terapia, le recomendó que asistiera al CRIT para que lo evaluaran, ya que iban a venir de Torreón unos ingenieros que ponen un aparato mecánico especial para caminar. El Doctor quería saber si Juan podía ser un buen candidato para usar ese aparato que le ayudara en su marcha.
Llegamos, esperamos un rato, pero, al entrar a la sala en dónde se le iba a evaluar, estaban también evaluando a varios niños discapacitados, con parálisis cerebral y otros problemas neurológicos y motores. Mi primera impresión fue terrible, se me encogió el estómago de ver esas piernitas flaquitas como tubos, encogidas y espásticas, así como sus cuerpecitos y sus caras deformes, lo peor es que algunos son niños inteligentes.
Ver esa tragedia me hizo olvidar la nuestra, o minimizarla.....Casi lloro con esos niños y le doy Gracias a Dios porque Juan va saliendo adelante y por la salud de mis hijos y nieta. También oré por los nietos que pronto tendré.
Lo que más me impactó fue ver a las mamás o abuelitas de esos niños con tanta dedicación y amor cuidándolos y tratándolos. No cabe duda que el amor transforma todo, una desgracia sufrida con amor se convierte en una gran oportunidad de crecimiento espiritual.
Le tomaron el molde de sus pies y tobillos, aunque parece que no es un sujeto ideal para el aparato. Pues este es para aquellos pacientes que están totalmente paralizados de la cintura para abajo, lo cuál no es su caso, ya que él ha estado recuperando el movimiento y los dolores y los espasmos.
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